Emunah | אמונה
Emunah, אמונה, es más que una simple creencia o una aceptación superficial de una verdad. Representa un reconocimiento profundo y claro de una realidad tan absoluta que queda incuestionada. Emunah es la experiencia profunda del alma de conocer algo más allá de las sombras de duda, más allá de los reinos turbios de ambigüedad o incertidumbre. Así, emunah se erige como la antítesis de la duda, una declaración firme contra la indecisión vacilante que puede surgir ante múltiples posibles elecciones o eventos. En esencia, la duda representa una falta de certeza, un vacío lleno de lo desconocido.
La duda tiene el poder de inmovilizarnos, deteniendo nuestras acciones y atrapando nuestros pensamientos en un pantano de indecisión. En cambio, la certeza nos libera. Rompe las ataduras de la duda y nos impulsa hacia adelante en el camino de la convicción.
En hebreo, el término para "duda" es "Safek" (ספק). Curiosamente, el valor numérico de Safek coincide con el de Amalek (עמלק), a quien las enseñanzas judías consideran nuestro enemigo más formidable. Amalek representa la ausencia total de significado y una desconexión marcada de Dios. Ambos términos comparten una gematría de 240, vinculando los conceptos de duda y desconexión espiritual.
Según la sabiduría de la Qabalah, la duda y la certeza no son meros estados psicológicos. Son manifestaciones tangibles de energía, idénticas en su esencia, pero diametralmente opuestas en su expresión. Pero cuando hablamos de "certeza", ¿a qué nos estamos refiriendo? Nos referimos a la certeza inquebrantable de que todo en el universo se origina en Dios.
La sabiduría eterna encapsulada en la Qabalah resuena con la verdad profunda, "Ein od milvado" (Deuteronomio 4:35), "No hay nada fuera de Él". No hay entidad ni fuerza más allá del Creador. Todo emana de Él, incluyendo lo que percibimos como bueno y lo que interpretamos como malo. Nuestra noción de mal surge de nuestra perspectiva limitada, nuestra incapacidad de comprender el gran diseño cósmico. Por lo tanto, a menudo malinterpretamos ciertos eventos o circunstancias como negativas.
La Qabalah imparte el mensaje tranquilizador de que no hay nada aleatorio o arbitrario en el universo. Todo funciona de acuerdo con leyes precisas e inquebrantables diseñadas para propósitos específicos. El azar no tiene dominio aquí. Cada evento, cada ocurrencia tiene un propósito, y este propósito envuelve nuestras vidas y los múltiples eventos dentro de ellas.
Cada situación que enfrentamos, cada circunstancia que navegamos, cada obstáculo que encontramos tiene una razón de ser. Todos ocupan un espacio designado en el gran plan divino. Eventualmente, cada pieza de este vasto rompecabezas cósmico encajará perfectamente, y veremos el cuadro completo. Sin embargo, nuestra visión a menudo es retrospectiva; conectamos los puntos mirando hacia atrás.
Es probable que recuerdes momentos en tu vida cuando te enfrentaste a adversidades o desafíos que en su momento parecían insuperables. No obstante, con la sabiduría de la retrospectiva y la perspectiva ganada a través de la experiencia, ahora puedes discernir cómo esos eventos contribuyeron significativamente a tu crecimiento personal o profundizaron tu comprensión del mundo.
La duda surge porque nuestra visión está confinada a un pequeño fragmento del panorama cósmico. Si tuviéramos emunah, la certeza inquebrantable de que todo tiene un propósito divino y que cada evento, por insignificante o terrible que parezca, finalmente contribuye a nuestro bien, entonces el miedo, la ansiedad y la desesperación perderían su control sobre nosotros. Empoderados por emunah, podríamos llevar vidas más plenas y felices.
Por lo tanto, nos corresponde cultivar y fomentar esta emunah, esta comprensión profunda y clara de que "Ein od milvado" (אין עוד מלבדו), no hay nada fuera de Dios, y que todo emana de Su luz divina.
El rey David, en el Salmo 23, proclama su emunah con convicción: "Aunque camine por el valle de la sombra de la muerte, no temeré mal alguno, porque tú estás conmigo". Este es el nivel de certeza al que deberíamos aspirar. No una certeza que depende de la ausencia de evidencia contradictoria, sino una certeza arraigada en el conocimiento profundo de la bondad y la guía inquebrantable de Dios en nuestras vidas.
De manera similar, en la Torá, Moisés lidera al pueblo de Israel a través del Mar Rojo en un momento de monumental incertidumbre y miedo. En Éxodo 14:13-14, Moisés declara: "No tengan miedo. Manténganse firmes y verán la liberación que el SEÑOR les dará hoy... El SEÑOR peleará por ustedes; ustedes solo deben quedarse quietos". Aquí, Moisés manifiesta una gran certeza y fe en Dios, personificando la esencia de emunah: la certeza absoluta de que todo proviene de Dios y que Dios siempre está con nosotros.
Por lo tanto, comprometámonos a nutrir esta emunah, a fortalecer nuestra convicción de que no hay nada fuera de Dios, y que todo, sin excepción, emana de Su luz divina.
Emunah, אמונה, is more than a mere belief or a superficial acceptance of a truth. It represents a profound, crystal clear recognition of a reality so absolute that it goes unquestioned. Emunah is the soul's profound experience of knowing something beyond the shadows of doubt, beyond the murky realms of ambiguity or uncertainty. Thus, emunah stands as the antithesis of doubt, a firm declaration against wavering indecision that may arise in the face of multiple possible choices or events. In its essence, doubt signifies a lack of certainty, a void filled with the unknown.
Doubt has the potency to immobilize us, halting our actions and ensnaring our thoughts in a quagmire of indecision. Conversely, certainty liberates us. It untethers the constraints of doubt and propels us forward on the path of conviction.
In Hebrew, the term for "doubt" is "Safek" (ספק). Intriguingly, the numerical value of Safek aligns with that of Amalek (עמלק), which Jewish teachings regard as our most formidable enemy. Amalek embodies the utter absence of meaning and a stark disconnection from God. Both these terms share a gematria, or numerical equivalence, of 240, linking the concepts of doubt and spiritual disconnection.
According to the wisdom of the Qabalah, doubt and certainty are not mere psychological states. They are tangible manifestations of energy, identical in their essence, yet diametrically opposite in their expression. But when we refer to "certainty," what exactly are we invoking? We are referring to the unshakeable certainty that everything in the universe originates from God.
The timeless wisdom encapsulated in the Qabalah reverberates with the profound truth, "Ein od milvado" (Deuteronomy 4:35), "There is none other than Him." There is no entity, no force beyond the Creator. Everything emanates from Him, including what we perceive as good and what we interpret as evil. Our notion of evil stems from our limited perspective, our inability to comprehend the larger cosmic design. Therefore, we often misconstrue certain events or circumstances as negative.
The Qabalah imparts the reassuring message that there is nothing random or arbitrary in the universe. Everything functions according to precise, unwavering laws designed for specific purposes. Chance has no dominion here. Every event, every occurrence has a purpose, and this purpose envelops our lives and the myriad events within them.
Each situation we face, every circumstance we navigate through, every obstacle we encounter has a reason for its existence. They all occupy a designated space in the grand divine blueprint. Eventually, every piece of this vast cosmic puzzle will interlock perfectly, and we will see the entire picture. However, our vision is often retrospective; we connect the dots looking backward.
Indeed, you may recall moments in your life when you were confronted with adversities or challenges that seemed insurmountable at the time. Yet, with the wisdom of hindsight and the perspective gained through experience, you can now discern how those events significantly contributed to your personal growth or deepened your understanding of the world.
Doubt arises because our vision is confined to a tiny fragment of the cosmic panorama. If we had emunah, the unwavering certainty that everything has a divine purpose and that every event, however seemingly insignificant or dire, ultimately contributes to our good, then fear, anxiety, and despair would lose their grip on us. Empowered by emunah, we could lead more fulfilled, happier lives.
Thus, it is incumbent upon us to cultivate and foster this emunah, this deep and lucid understanding that "Ein od milvado" (אין עוד מלבדו), there is none other than God, and that everything springs from His divine light.
King David, in Psalm 23, proclaims his emunah with conviction: "Even though I walk through the valley of the shadow of death, I will fear no evil, for you are with me." This is the level of certainty we should aspire to attain. Not a certainty that relies on the absence of contradicting evidence, but a certainty rooted in the profound knowledge of God's unwavering goodness and guidance in our lives.
In a similar vein, in the Torah, Moses leads the people of Israel through the Red Sea in a moment of monumental uncertainty and fear. In Exodus 14:13-14, Moses declares: "Do not be afraid. Stand firm and you will see the deliverance the LORD will bring you today... The LORD will fight for you; you need only to be still." Here, Moses manifests great certainty and faith in God, epitomizing the essence of emunah – the absolute certainty that everything comes from God and that God is always with us.
Therefore, let us commit to nurturing this emunah, to fortifying our conviction that there is none other than God, and that everything, without exception, emanates from His divine light.
エムナー, אמונה, は単なる信念や真実の表面的な受け入れ以上のもの。絶対的な現実の深く澄んだ認識を表しており、疑うことのないものである。エムナーは、疑いの影や曖昧さのある領域を超えた、魂の深い経験を意味する。したがって、エムナーは疑いの反対であり、可能な選択や出来事に直面して生じる優柔不断に対する確固たる宣言だ。本質的には、疑いは不確実性、未知の空虚を表している。
疑いは我々を動けなくし、行動を止め、思考を優柔不断の沼地に陥れる力を持つ。それに対し、確実性は我々を解放する。疑いの束縛を断ち切り、信念の道へと進む力を与える。
ヘブライ語で「疑い」を意味する「サフェク」(ספק)の語は、アマレク(עמלק)と数価が一致する。ユダヤ教の教えでは、アマレクは最も手強い敵とされ、完全な意味の欠如と神からの断絶を体現している。これら両方の語は数価240を共有し、疑いと霊的断絶の概念を結びつけている。
カバラの知恵によれば、疑いと確実性は単なる心理状態ではない。それらはエネルギーの具体的な表れであり、本質的には同一でありながら、その表現においては完全に逆のものだ。しかし「確実性」とは何を指すのか。それは、宇宙のすべてが神から発しているという揺るぎない確信を指す。
カバラに収められた時を超えた知恵は、「エイン オド ミルヴァド」(申命記4:35)、「彼以外にはいない」という深い真理を響かせる。創造主以外の存在や力はない。善と解釈されるものや悪と解釈されるものを含むすべては神から発している。我々の悪の概念は、我々の限られた視点、宇宙の大いなるデザインを理解できないことから生じる。そのため、特定の出来事や状況をしばしば否定的に誤解してしまう。
カバラは、宇宙においてランダムや恣意的なものは何もないという安心感を伝えている。すべては特定の目的のために設計された精密で揺るぎない法則に従って機能している。偶然の支配はここにはない。すべての出来事には目的があり、この目的は我々の生活やそれに含まれる数々の出来事を包んでいる。
我々が直面するすべての状況、通過するすべての状況、出会うすべての障害には存在する理由がある。それらは神の大きな計画の中で指定された空間を占めている。最終的には、この広大な宇宙のパズルのすべてのピースが完全に結びつき、全体像が見えてくる。しかし、我々の視野はしばしば後ろを向いている。後ろを見て点をつなぐことができるのだ。
確かに、かつて克服不可能と思われた逆境や挑戦に直面した時のことを思い出すかもしれない。しかし、経験を通じて得た洞察と視点を持つことで、それらの出来事がいかにして個人的な成長や世界の理解を深めることに大きく貢献したかを見出すことができる。
疑いは、我々の視野が宇宙のパノラマのほんの一部に限られているために生じる。もしエムナーを持っていたなら、すべてには神の目的があり、すべての出来事は最終的に我々のために寄与していると確信していたなら、恐怖や不安、絶望はその支配を失うだろう。エムナーによって力を得ることで、より満たされた、幸福な生活を送ることができるのだ。
したがって、このエムナーを育み、「エイン オド ミルヴァド」(אין עוד מלבדו)、神以外には何もなく、すべてが彼の神聖な光から発しているという深い理解を養うことが求められる。
ダビデ王は詩篇23で、「たとえ死の影の谷を歩んでも、私は悪を恐れない。あなたが共にいるから」とそのエムナーを確信を持って宣言する。これが我々が目指すべき確実性のレベルだ。矛盾する証拠の不在に依存する確実性ではなく、神の揺るぎない善意と導きへの深い知識に根ざした確実性である。
同様に、トーラーでは、モーセがイスラエルの民を紅海を通して導き、大きな不確実性と恐怖の中に立っている。出エジプト記14:13-14でモーセは、「恐れるな、立ち止まって、主が今日あなた方に与える救いを見よ…主があなた方のために戦う。あなた方はただ静かにしていればよい」と宣言する。ここでモーセは神への大きな確信と信仰を示し、すべてが神から来て、神が常に共にいるというエムナーの本質を体現している。
したがって、このエムナーを育み、神以外には何もなく、すべてが彼の神聖な光から発しているという確信を強化することを誓おう。